Queremos y podemos
- Por Hilda Pupo Salazar
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No siempre poder es querer o viceversa, porque el pretender es poderoso, pero el hacer es lo que realmente transforma las aspiraciones en realidad, aunque uno requiere del otro para llegar al fin propuesto.
La magia de la vida es el imperio de tu mente, porque cuando crees que puedes y cuando profesas que no, en ambos casos asume toda la fuerza para la acción, tanto positiva como negativa.
Si juzgas que eres apto para conseguir algo, influye directamente sobre tu capacidad de obtenerlo, cuando tienes total decisión, constancia, flexibilidad para vencer obstáculos, generar energías y emociones positivas, con tus propósitos y empeños bien consolidados para alcanzar y hacer crecer los éxitos anhelados.
Por eso una mente saludable, optimista, sin pesimismo es fundamental para el triunfo de tu voluntad, como fiel guía de tus pensamientos, con el mejor adiestramiento para que obedezcan a tus propósitos, sin que aflore la incertidumbre por muy enmarañados que sean los momentos.
Y todo ello patentiza que el empeño determina la acción con persistencia y constancia, e ir poco a poco para conquistar y materializar lo que antes fue tu querer y lograr poder, porque confiaste en ti, de lo contrario solo quedas en la magia del sueño.
Podemos determinar que querer es: poseer la pretensión, atrevimiento, propósito de emprender para alcanzar un fin, mientras poder: contar con la capacidad, potestad para concebir el objetivo propuesto.
Entonces puedes confiar que cuando quieres, también puedes porque estás dispuesto a conseguirlo sin importar el sacrificio e identificar la realidad de como debes realizar tus proyectos, con genuino realismo y que solo es alcanzable por tus esfuerzos, méritos propios y desde la confianza que estás decidido a vencer inconvenientes para llegar a la victoria,
Quienes naufragan es por la ruptura entre el querer y el poder, porque cuando pretendes no confías en alcanzarlo y cuando puedes no te animas.
Para plasmar las intenciones la voluntad tiene que ser de hierro, con persistencia y decisión, muy clara del objetivo trazado para coronar la cima, seguro de poner todas tus energías y amor.
“Querer, es poder” es real y contundente sus consecuencias, pero saber lo que ambicionas es determinante, para darle el rumbo a tus pasos, porque si no estás convencido y es solo por embullo no lo vas a lograr. Los triunfadores asumen hacer de esa sencilla fórmula con “los pies bien puestos sobre la tierra”, porque saben que una cosa es querer y otra es poder.
Podemos profundizar con esta frase de Will Smith, actor de cine estadounidense: “No hay un modelo fácil de hacerlo, no importa qué tan talentoso seas. Tu talento te va a fallar si no estás capacitado, si no estudias, si no trabajas realmente duro y te dedicas a ser mejor cada día nunca serás capaz de dedicar tu arte a la gente que quieres”.
