Hepatitis A ¿enfermedad nueva?
- Por Lourdes Pichs Rodríguez
- Hits: 1707
Ante el alza de casos reportados, en las últimas semanas, con las hepatitis virales en el país, en la provincia se ha activado el sistema de vigilancia y control de estas enfermedades, con el reporte de 75 pacientes hasta el jueves 26 de diciembre, fundamentalmente en el municipio de Holguín, pero en 2023 hubo un brote en Cueto, de causa hídrica.
En específico sobre la Hepatitis A (antes nombrada hepatitis vírica, viral o infecciosa), la especialista de Segundo Grado en Higiene y Epidemiología, María Eugenia Escobar Pérez, informó que esta es la enfermedad infecciosa más frecuente que produce hepatitis aguda en el mundo(inflamación del hígado) y es causada por el virus de la hepatitis A (VHA), cuyo reservorio natural es solamente humano, fue descrita por primera vez por Hipócrates en la antigüedad.
Se trasmite a través del consumo de agua o alimentos contaminados por heces de personas infectadas o enfermas. “No lleva al enfermo a la cronicidad y la mortalidad es muy baja”, aclaró.
La también máster en enfermedades infecciosas apuntó que “en Cuba la hepatitis viral tipo A tiene un comportamiento endemo/epidémico, con ciclos epidémicos cada tres a cinco años. Pueden surgir brotes por esta causa, de dos o más casos relacionados entre sí o los vinculados con el consumo de aguas o alimentos contaminados, enmarcados en el período de incubación que es de hasta 50 días”.
Significó que es más frecuente en los niños que en los adultos, pero cuando la enfermedad aparece en adulto sí puede ser más grave, al tiempo que aclaró que padecerla deja inmunidad, es decir, no se repite, aunque se exponga nuevamente al virus.
Entre los síntomas más frecuentes están: fiebre, malestar, pérdida de apetito, diarreas, náuseas, molestias abdominales, coloración oscura de la orina e ictericia (tonalidad amarillenta de la piel y la esclerótica ocular) y las heces fecales son blanquecinas.
Pero también puede ser asintomática; no obstante, los adultos muestran signos y síntomas con mayor frecuencia que los niños, aunque la mayor parte de las personas se recupera al cabo de varias semanas o a veces meses, sin sufrir complicaciones, pues no deriva a la cronicidad.
Debido al incremento de esta enfermedad están en marcha estrategias para su control, como la pesquisa a todos los contacto del caso, tanto los de la vivienda, los compañeros del aula, centro de trabajo, salón de círculos infantiles, así como a los manipuladores de alimentos, entre otros.
Además, se orienta consumir agua de calidad, hervida o clorada; incrementar la exigencia sanitaria sobre la manipulación y expendio de alimentos, para disminuir el riesgo de contaminación de los mismos; lavar las manos antes de ingerir alimentos y después de ir al baño, aplicar gammaglobulina estándar a todos los contactos de los casos positivos, esto no es una vacuna aunque es inyectable, se emplea para tratar de interrumpir el proceso infeccioso en los contactos de los caso positivos (quimioprofilaxis).
De igual manera se orienta la evacuación apropiada de las aguas residuales de la comunidad, junto con prácticas de higiene personal, tales como el lavado regular de las manos, verduras y otros alimentos, para reducir la propagación del virus.
Según explicó Escobar Pérez “no hay ningún tratamiento específico para la Hepatitis A”, al tiempo que detalló que “al inicio hay inapetencia y luego el apetito se va recuperando poco a poco. La dieta debe ser libre y baja de grasas y hacer reposo”.
Finalmente detalló: “El desarrollo científico técnico de nuestro tiempo ha permitido conocer que, al menos cinco agentes virales distintos denominados A,B,C,D y E bien conocidos, junto a otros como el G, TTV y Sen-V, cuya patogenicidad no está totalmente esclarecida hasta ahora, son los responsables de un grupo de enfermedades muy similares desde el punto de vista clínico, pues la sintomatología es muy similar, pero se diferencia en la forma de trasmitirse , por lo que las medidas de control son diferentes.
“Hay otras causas de hepatitis aguda reactiva a otras infecciones, como es el dengue y la leptospirosis, pero no son trasmisibles de una persona a otra”.