Prevenir la diabetes
- Por Lourdes Pichs Rodríguez
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“La diabetes no se cura, solo se controla, pero se puede prevenir”, este explícito mensaje con gran carga de advertencia lo recordé durante el Día 14, dedicado, mundialmente, a concientizar sobre esta enfermedad crónica metabólica, cuya incidencia en las Américas sobrepasa los 62 millones de personas que padecen la del tipo 2, según datos de la Organización Panamericana de la Salud.
Con el paso del tiempo este trastorno metabólico puede ocasionar daños graves a varios órganos y tejidos, entre ellos: ojos, riñones, nervios, corazón y vasos sanguíneos, de ahí la importancia de evitar la enfermedad, cuyos riesgos inician desde antes de nacer y de padecerla resulta imprescindible cumplir con el tratamiento y demás orientaciones de los especialistas.Aunque existen tres tipos de DM, la del Tipo 2 es la más frecuente, que por lo regular predomina en los adultos; la Uno, conocida como la diabetes juvenil o insulinodependiente y la gestacional que se presenta durante el embarazo.
La provincia de Holguín no está exenta de ese problema de salud. Más de 10 mil holguineros padecen la enfermedad, de acuerdo con últimos datos de dispensarización; sin embargo, la cifra podría ser superior, pues muchos pueden tener DM sin apenas darse por enterados, de ahí su sobrenombre: asesina silenciosa.
Como bien lo alertábamos en el inicio con la sentencia del diabetólogo Blas López Rubio, coordinador del Centro Integral de Atención al Diabético de Holguín, este padecimiento no se cura, por lo cual hay que aprender a vivir con él. En esa unidad de Salud con cerca de 30 años de experiencia, un equipo multidisciplinario, hace entender a los pacientes la importancia del autocuidado, “regla de oro para vivir y vivir con calidad, pues este enfermo es una esponja, que lo recoge todo”.
Por lo regular, en el Centro, localizado en el reparto Peralta, 20 pacientes con la enfermedad tienen ingreso diurno a la semana, entre los descompensados y debutantes, los cuales son asistidos por profesionales de varias especialidades, como diabetólogo, endocrino, oftalmólogo, dermatólogo, nutricionista y otros para en su conjunto ayudar al enfermo y su familia a manejar de la mejor manera este padecimiento.
Otro lugar especial tiene el Servicio de Endocrinología del hospital pediátrico Octavio de la Concepción de la Pedraja, donde los niños una vez diagnosticados con la DM durante su estancia en la institución reciben de manera especial una preparación para enfrentar la enfermedad con la ayuda de sus padres.
De manera general, en la provincia a partir del Programa de Atención integral al paciente diabético se han favorecido cientos de holguineros, que disponen de una de consulta integral, como mínimo, para la atención a pacientes diabéticos en cada municipio, pero en el caso del territorio cabecera son 10, una por cada área de Salud, lo cual sitúa a la provincia entre las de mejores resultados en esta línea de trabajo, dirigida a elevar la calidad de vida de los enfermos y evitar la amputación mayor de algunos de sus miembros inferiores.
Las cifras de diabéticos y complicaciones de la enfermedad deben llamar a seguir el consejo médico de ingerir alimentos nutritivos, frescos y saludables; realizar ejercicios todos los días por espacio de unos 30 minutos como mínimo y evitar la obesidad, pero llegar a padecerla solo su especialista es el encargado de decirle qué conducta asumir para enfrentarla y vivir con ella con mejor calidad de vida.
La diabetes mellitus (DM) está determinada por niveles altos de azúcar en sangre, con una asociación muy estrecha a la deficiencia absoluta de la producción de la acción de la insulina, sustancia producida en nuestro organismo para contribuir a beneficiar la energía de los alimentos consumidos, para así ayudarnos a efectuar los deberes cotidianos desde caminar, estudiar, trabajar hasta muchas otras actividades, es como la “gasolina” del cuerpo.
Con el paso del tiempo este trastorno metabólico puede ocasionar daños graves a varios órganos y tejidos, entre ellos: ojos, riñones, nervios, corazón y vasos sanguíneos, de ahí la importancia de evitar la enfermedad, cuyos riesgos inician desde antes de nacer y de padecerla resulta imprescindible cumplir con el tratamiento y demás orientaciones de los especialistas.Aunque existen tres tipos de DM, la del Tipo 2 es la más frecuente, que por lo regular predomina en los adultos; la Uno, conocida como la diabetes juvenil o insulinodependiente y la gestacional que se presenta durante el embarazo.
La provincia de Holguín no está exenta de ese problema de salud. Más de 10 mil holguineros padecen la enfermedad, de acuerdo con últimos datos de dispensarización; sin embargo, la cifra podría ser superior, pues muchos pueden tener DM sin apenas darse por enterados, de ahí su sobrenombre: asesina silenciosa.
Como bien lo alertábamos en el inicio con la sentencia del diabetólogo Blas López Rubio, coordinador del Centro Integral de Atención al Diabético de Holguín, este padecimiento no se cura, por lo cual hay que aprender a vivir con él. En esa unidad de Salud con cerca de 30 años de experiencia, un equipo multidisciplinario, hace entender a los pacientes la importancia del autocuidado, “regla de oro para vivir y vivir con calidad, pues este enfermo es una esponja, que lo recoge todo”.
Por lo regular, en el Centro, localizado en el reparto Peralta, 20 pacientes con la enfermedad tienen ingreso diurno a la semana, entre los descompensados y debutantes, los cuales son asistidos por profesionales de varias especialidades, como diabetólogo, endocrino, oftalmólogo, dermatólogo, nutricionista y otros para en su conjunto ayudar al enfermo y su familia a manejar de la mejor manera este padecimiento.
Otro lugar especial tiene el Servicio de Endocrinología del hospital pediátrico Octavio de la Concepción de la Pedraja, donde los niños una vez diagnosticados con la DM durante su estancia en la institución reciben de manera especial una preparación para enfrentar la enfermedad con la ayuda de sus padres.
De manera general, en la provincia a partir del Programa de Atención integral al paciente diabético se han favorecido cientos de holguineros, que disponen de una de consulta integral, como mínimo, para la atención a pacientes diabéticos en cada municipio, pero en el caso del territorio cabecera son 10, una por cada área de Salud, lo cual sitúa a la provincia entre las de mejores resultados en esta línea de trabajo, dirigida a elevar la calidad de vida de los enfermos y evitar la amputación mayor de algunos de sus miembros inferiores.
Las cifras de diabéticos y complicaciones de la enfermedad deben llamar a seguir el consejo médico de ingerir alimentos nutritivos, frescos y saludables; realizar ejercicios todos los días por espacio de unos 30 minutos como mínimo y evitar la obesidad, pero llegar a padecerla solo su especialista es el encargado de decirle qué conducta asumir para enfrentarla y vivir con ella con mejor calidad de vida.
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