Recuerdo como si fuera ayer, aquel alborozado viernes, 6 de octubre de 2000: el pueblo holguinero y autoridades homenajeaban a sus medallistas y campeones olímpicos de Sidney en la plaza Camilo Cienfuegos, que relucía con tantas estrellas brillando al mismo tiempo: Legna, Kindelán, Valodia, Urbia y…uno de aquellos astros tenía cuerpo de linda mulata, quien sonriente y coqueta le decía, una y otra vez, al periodista: “Hoy no puede ser, pronto regreso y le aviso…”