Nadie puede negar que el Sistema del Plan Jaba (PJ) solicitaba a gritos un cambio radical, desde su proceso de solicitud, otorgamiento hasta el momento de hacer efectivo ese derecho en bodegas, conferido por la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en coordinación con el Ministerio de Comercio Interior (Mincin), para favorecer a núcleos, cuyos miembros -todos- estuvieran incorporados al trabajo o estudio.