Holguín, mayor control popular sobre programas de autoabastecimiento
- Por Ania Fernández Torres
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Para que en los municipios se concrete, verdaderamente, el autoabastecimiento territorial es necesario implicar a los miembros de las comunidades holguineras en la ejecución eficaz del control popular a aquellos programas de agricultura desarrollados en cada Consejo Popular, aseveró Maité Pupo Romero, al frente del Departamento Independiente de Atención a las Asambleas Municipales del Poder Popular y el vínculo con los diputados en la provincia.
Durante reunión, mediante videoconferencia, con los presidentes de consejos populares de la provincia, que estuvo conducida también por Rigoberto Rivero Duran, coordinador de los Programas Agroalimentarios en el Gobierno Provincial, se conoció que se busca lograr mayor autonomía a los territorios y el apoyo de la población en el incremento paulatino de los indicadores productivos que aseguran la soberanía alimentaria y la educación nutricional.
Entre los principales programas, que deben ser apoyados con el control popular, están el uso y tenencia de tierra, el cumplimiento de la siembra en las campañas, contratación de las producciones, los programas de plátano, yuca, boniato, malanga, ñame, fruta bomba, guayaba, piña y alcanzar las 30 libras per cápita de viandas, hortalizas, frutas y proteína animal.
En estos temas resalta, además, la necesidad de lograr la existencia de 10 metros cuadrados de tierra sembrada por habitante en cada territorio, en organoponicos y huertos, casa de cultivo rústicas y patios y parcelas y especialmente la producción de cinco kilogramos de proteínas por habitante.
Actualmente uno de los retos fundamentales es la construcción de módulos pecuarios, con cerdos de capa oscura, aves rústicas, ganado menor ovino caprino, cunícola y la acuicultura. Ahora se incorpora la carne vacuna, tras la autorización de su comercialización y que ya rinde frutos en algunos consejos populares.
Sujetas también al control popular quedan otros programas que tributan a la sostenibilidad de las comunidades como las minindustrias, y toda acción que tenga que ver con las producciones agropecuarias, de café, cacao, coco y la ganadería, la siembra de alimento animal y de plantas proteicas, así como el impago a productores y las inversiones que se realizan en cada Consejo Popular.
La Ley 132, del Funcionamiento de Asambleas Municipales y los Consejos Populares, dentro de atribuciones dirigidas al control de la ejecución de las políticas del Estado en las entidades de su demarcación, hace énfasis en el papel de alta autoridad de los presidentes de consejos populares en su demarcación y la obligatoriedad de todos los organismos de responder, participar y dar respuesta a cada una de los asuntos reflejados en el control popular.
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