La frase ¡Ah, entonces ese sí es mi hijo Calixto: muerto antes que rendido! es la de mayor trascendencia, pero la vida de Lucía Íñiguez Landín estuvo matizada por anécdotas que ponen de relieve su temperamento de patriota y madre corajuda, como aquella cuando disfrazó a otro de sus hijos de muchacha para que pasara inadvertido ante las tropas españolas.

En medio de toda la vorágine de trabajo la enfermera del consultorio médico no pasó por alto citar a las mujeres de su radio de acción para realizarles la prueba citológica. La señora escurridiza de siempre, una vez más, le dijo que después y así sucedió hasta que un día, finalmente, accedió a hacerse la citología tras muchos ruegos de la salubrista, porque “es muy importante para prevenir y diagnosticar los distintos tipos de enfermedades y patología que pueden afectar tu aparato genital”, insistía la de bata blanca.

Fotos: De la autora

Para premiar la voluntad y la vocación de los jóvenes escritores de Cuba regresa del 15 al 18 de junio próximo a la ciudad de Holguín el Premio Celestino de Cuentos, bajo el auspicio de Ediciones La Luz, sello de la Asociación Hermanos Saíz, el cual dedicará su XXIII edición a los 110 años del poeta, narrador y dramaturgo cubano Virgilio Piñera.