Celebran aniversario “Camilitos” holguineros
- Por Luly Legrá Pichs
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Fotos: Elder LeyvaLlegar a 50 años de edad significa para muchos madurez acumulada, un momento de la vida en que la mayoría de las aspiraciones personales se han logrado. Cuando ese tiempo los cumple una institución y se mira hacia atrás podría decirse que resulta bastante tiempo; en cambio, si la vista se dirige hacia el futuro, resultaría poco.
Sin dudas, cinco décadas marcan un nuevo punto de partida que impulsa y reta a ser mejores. Así lo asumen estudiantes y profesores de la Escuela Militar Camilo Cienfuegos (EMCC) de Holguín, que este 28 de febrero se convierte en un centro quincuagenario.
En 1968, en Aguas Claras, a cinco kilómetros de la ciudad de Holguín, abrió sus puertas la unidad docente, la quinta de su tipo en Cuba en aquel momento, con una matrícula de 114 estudiantes.
Desde aquella fecha, hasta ahora, ha graduado (bachilleres) a más de 12 mil 520 jóvenes. Hoy muchos son profesionales destacados, Generales y otros altos oficiales o simplemente hombres y mujeres de bien, como les exhortaron ser.
Inmerso en las faenas de limpieza para celebrar el aniversario de su “otra casa” está Marcos César Vilanova, estudiante de 12 grado. Para él, los casi tres años que lleva allí lo han transformado en una mejor persona, organizada, responsable y disciplinada con un alto sentido de pertenencia para con la Patria.
“Aquí he aprendido lo importante que somos nosotros, los Camilitos, para asegurar la defensa de mi país. Para mí es un orgullo portar el uniforme de esta orden, porque es símbolo de los valores más puros y honestos que pueda tener un joven”, confiesa, al tiempo que asegura continuará en la vida militar al optar por la carrera de Infantería.
Similares sentimientos comparte Eloísa Jomarrón Lozada, quien cursa el onceno grado y desde temprana edad supo que sería una de los jóvenes vestidos de verde. “En la escuela he encontrado otra familia, bueno, más bien una extensión de esa otra grande que tengo en el Hogar para niños sin amparo filial, donde me he criado”.
“En los ¨Camilitos¨, los estudiantes nos crecemos desde todos los puntos de vista, tanto docente como físicamente, y aunque esta última resulta muy dura para mí, como mujer, no la considero un obstáculo, solo un reto para progresar en la vida. Vine a forjar mi futuro y cuando se quiere algo hay que luchar y esforzarse por ello.
“Deseo que mi centro continúe formando al relevo de las filas de la Fuerzas Armadas Revolucionarias, y que sus puertas nunca cierren, para que jóvenes como yo puedan cumplir sus sueños aquí”, puntualizó.
Anhelo compartido por Andrés La Rosa Fuentes, profesor que ha dedicado 40 años de su existencia a introducir a 39 generaciones en los caminos de las Ciencias Sociales.
“Espero que esta institución nunca pierda su prestigio, que se mantenga por mucho tiempo más y cuando algún egresado pase por esta zona diga con orgullo esta es mi escuela, yo aún soy Camilito”, expresa con la sencillez y sabiduría que lo caracterizan.
Para el Teniente Coronel Antonio Bigñot Bueno, director de la EMCC de Holguín, un factor clave en la formación de valores y en los resultados que ostenta hoy ese centro es la relación escuela-familia-sociedad, “una tríada imprescindible para completar esa preparación integral que tanto distingue a los jóvenes egresados de este centro docente educativo”.
“Conmemorar el aniversario 50 es un desafío con el fin de mantener la excelencia del claustro y de los estudiantes, que muchos, en el día de mañana serán parte de las FAR”.
Disímiles historias para contar tienen quienes se han instruido allí. Para ellos es un hito digno de rememorar en interminables conversaciones sobre fuertes entrenamientos, estudios, ejercicios militares, las noches de recreación, los amigos que se convirtieron familia.
Quien fue un día Camilito lo será siempre, porque esta institución, que hoy celebra sus 50 años, no deja solo una huella, sino que forma un carácter, una actitud para toda la vida.
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