Rostros de la 26 de Julio

Septiembre 7, 2023
Por Jorge Fernández Pérez
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Experiencia y relevo se dan la mano en la Empresa Mecánica Héroes del 26 de Julio de Holguín. Fotos: Del autor

Calificada como una joya de la industria cubana por el Líder Histórico de la Revolución, Fidel Castro Ruz, la Empresa Mecánica Héroes del 26 de Julio (Holmeca), constituye un centro de referencia en nuestro país, enfocado en la producción de maquinarias destinadas a la agricultura.

El otrora Combinado de Implementos Agrícolas suma 42 años de incansable accionar, desde su fundación el 27 de julio de 1981. No pocos retos ha sorteado en un camino de más de cuatro décadas, pero la clave de sus resultados está dada, en buena medida, en la entrega de su incansable colectivo.

Las diferentes áreas de Holmeca se llenan de vida, cada día, con rostros de trabajadores entusiastas que, a pesar de los problemas cotidianos, ven en la institución una extensión de sus hogares. Experiencia y juventud confluyen, con especial armonía, entre los protagonistas de su historia y los encargados de escribir su futuro.

En la historia de la Empresa

Marlenys Barzaga Rodríguez.

En los 42 años que cumplió la Empresa en este 2023, Marlenys Barzaga Rodríguez ha sido una constante. Llegó siendo muy joven y hoy se encuentra jubilada, pero reincorporada, pues hay un magnetismo que le impide separarse de ese eslabón central de su vida.

“A esta Empresa he entregado los mejores años, toda mi juventud. Me encuentro reincorporada en mi plaza de consultora, en la que me he desempeñado durante tanto tiempo.

“Hemos pasado momentos muy duros, con necesidad de desdoblarnos y asumir otras funciones, pero nunca claudicamos. Gracias a mi puesto laboral pude conocer mi país, pues en ocasiones tuve que cumplir tareas en otras provincias.

“Recibir evaluaciones satisfactorias en múltiples auditorías al control interno es un incentivo para continuar el trabajo. En estos tiempos, que demandan de mucha efectividad, nuestros logros son el resultado de la labor conjunta. Siempre estaremos para ayudar y colaborar en el sitio que se nos requiera”.

La sonrisa delata a esta carismática obrera, que no puede disimular el apego que siente por la Empresa Holmeca. Mientras comparte anécdotas, ríe y se emociona al rememorar valiosos momentos que la han hecho crecer, en diferentes aristas.

“Pienso que tengo un lugar en la historia de la Empresa. Aquí me formé como trabajadora, dirigente sindical y, sobre todo, como mujer. Todos mis sueños y motivaciones están ligados a mi centro de trabajo”.

Este lugar es mi casa

Orlando González González.

Más de 8 lustros ha entregado el tenaz Orlando González González a su labor como soldador, en lo que él califica como “un trabajo de sudor y sangre”. Luego de rotar por diferentes puestos laborales en otros centros llegó a la que sería su casa en los albores de la década del 80, del pasado siglo. Desde ese momento, no concibe su rutina de otra forma.

“Es un compromiso con la Revolución y conmigo mismo. A mí nadie me enseñó a soldar, yo me fui preparando poco a poco por libros y con mucho estudio, para luego llevarlo a la práctica. Ni en los momentos más duros he pensado en abandonar mi sitio”.

Entre risas cuenta de su vinculación con diferentes proyectos, que ha asumido la entidad, y en los que se siente honrado de haber aportado su grano de arena.

Ha merecido reconocimientos a diferentes niveles, pero confiesa que, compartir de cerca con sus compañeros, es el principal motivo de su felicidad. “Me gusta mucho estar aquí con mis amigos”, señala.

¿Jubilarse? Orlando ni siquiera lo contempla, pues a sus 77 años se siente fuerte y con muchas ganas de hacer. Rehúye y posterga sus establecidas vacaciones, pues admite que no puede pasarse mucho tiempo sin sentirse útil para los demás.

“Cojo 3 días de descanso y me siento mal, mi cuerpo se siente raro. No quiero retirarme, deseo continuar aportando mientras esté vivo. Este lugar es mi casa”.

Nunca parar de aprender

Juan Miguel Leyva González.

Una de las últimas adquisiciones de Holmeca fue el joven Licenciado en Economía, Juan Miguel Leyva González, actualmente en adiestramiento. De esa industria holguinera conoció por su primo, obrero de la misma, y supo que quería seguir sus pasos e iniciar allí su vida laboral.

“Desde que entré, mis compañeros me han atendido muy bien, han sido muy amables y serviciales. Este corto tiempo me ha permitido adquirir diversos conocimientos. Pienso que uno nunca para de aprender.

“Estar rodeado de fundadores me ha posibilitado recibir sus enseñanzas. Intercambio mucho con ellos, conversamos, pues tienen la experiencia, me corrigen, sugieren nuevas formas de hacer y complementan mi formación.

“Me gusta el trabajo que se realiza en los talleres. Cuando se me da la oportunidad los visito, observo los procesos, intercambio con los trabajadores y aclaro mis dudas sobre diversos mecanismos. Ellos siempre me escuchan y apoyan”.

Poco después de su ingreso, asumió la dirección del secretariado del Comité de Base de la Unión de Jóvenes Comunistas. Las situaciones adyacentes no mellan su sentido del deber y, hasta el momento, su proyecto de vida está vinculado por entero a la Empresa.

“Me motiva saber que superaremos cualquier traba y saldremos adelante. Holmeca es un pilar de Holguín y de Cuba. Desarrollarme a nivel profesional, como parte de su equipo, es un privilegio”.

La Empresa Mecánica Héroes del 26 de Julio resulta una institución clave en nuestra Isla. Su encanto industrial no pasa desapercibido y, a pesar de las dificultades, promete continuar avanzando con la valía de su recurso humano, como fortaleza fundamental.

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