Adiós al 2022

Es importante que podemos juntos decirles adiós a estos 12 meses, con muchos días agrios, pero saboreamos la dulzura, de poco a poco, la normalidad, aunque todavía queda mucho camino por recorrer a partir de mañana con el advenimiento del 2023, cuando debemos ser más prudentes, responsables, disciplinados, flexibles, amorosos… en fin buenas personas.

 Dejamos atrás recuerdos buenos y malos con seres queridos que ya no están, precios altos, prolongados apagones, escasez en productos y medicamentos de alta necesidad, bolsillos llorosos, una inflación galopante, accidentes, desastres naturales, crecidos desafíos y adversidades de todo tipo, que nos laceran la cotidianidad con sufrimientos que nos hicieron vulnerables o más fuertes, pero seguimos adelante, con resiliencia.

Lo iniciamos un sábado primero de enero, en el calendario gregoriano y lo despedimos este sábado 31 de diciembre, para el horóscopo chino fue el Año del Tigre y de acuerdo con la ONU, Año Internacional del: Vidrio; Desarrollo Sostenible de las Montañas; de las Ciencias Básicas para el Desarrollo Sostenible, de la Pesca y la Acuicultura Artesanales, así como de la Juventud, en la Unión Europea.

La suma del 2022 es 6. Esta numerología significaba inspiraciones, ser más condescendientes, buscar una renovación, con fe propia, autoconfianza, logros y alegrías recuperadas, equilibrio, hogar, salud, amor, éxitos y entregas, desde la energía que inculcan la disciplina, límites y humanitarismo.

Ahora toca el resumen que cada quien pueda hacer al decidir botar su cubo de agua cuando el reloj marque las 12 de esta noche, o cualquier otra de las tradiciones de cada familia.

Muchos reflexionan sobre lo dejado atrás, cuando en el debut de este año recibieron saludos como: “Que sea inolvidable para ti, que todos tus sueños se realicen, que nada te detenga para cumplir tus metas en estos 365 días, con salud, alegría, satisfacción, que es lo más importante, que nuestra amistad y amor crezcan…”

Si en el 2022 la vida te arropó con cientos de razones para sufrir o llorar, es el momento de empinarse y demostrar las múltiples posibilidades para buscar nuevos sueños en los próximos 356 días, desde tus propias percepciones, en un complejo entramado del país para superar los colosales desafíos de una economía fuertemente bloqueada por el envidioso vecino, además, de nuestros propios errores e ineficiencias, muchos de los cuales, lamentablemente, pasan de años en años.

Dejamos atrás este año, marcado por un gran número de hechos que pusieron en jaque nuestras vidas, cuando aún el coronavirus sigue su amenaza, pero hemos aprendido mucho, por los diferentes momentos vividos, a conocer más a familiares, amigos, vecinos y compañeros de estudio o trabajo.

Digamos adiós al 2022 con la confianza que vamos todos juntos a vencer. Con seguridad levantemos las copas y ¡brindemos por un mejor 2023!

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