¡Vacaciones de verano!
- Por Lourdes Pichs Rodríguez
- Hits: 2584
Dígase vacaciones de verano y en la mente de muchos, sobre todo en la de una mayoría de niños, adolescentes y jóvenes, comienzan a imaginarse las más disímiles aventuras desde fiestas, montar bicicletas o patines hasta paseos o viajes al campismo, ríos, piscinas y playas…
Sin embargo, pocos de esos grupos etarios se detienen a pensar que, precisamente, los meses de julio y agosto son los más propensos a la ocurrencia de principales accidentes en carreteras, por caídas, quemaduras y ahogamientos.
Los que unidos a otros del grupo de lesiones no intencionales constituyen la primera causa de morbi-mortalidad en las edades comprendidas entre uno a 24 años de edad, por lo cual una vez más es el llamado a las familias a explicarles a sus hijos, nietos, sobrinos y otros de cuál debe ser el comportamiento en cada lugar al cual asistan.
Por ejemplo, el 25 de Julio, es el Día Mundial de Prevención del ahogamiento, declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas desde abril de 2021, a través de una resolución de ese organismo, con el propósito de lograr concienciar a la población sobre ese problema prevenible, que ha provocado el fallecimiento de más de 2,5 millones de personas en la última década.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) las tasas más elevadas de ahogamiento se reportan entre los niños de uno a cuatro años de edad, seguidos por los de cinco a nueve, aunque también tienen gran incidencia entre los jóvenes, a los cuales les gusta bañarse en ríos, pozos, canales, presas, albercas y playas, no pocas veces de manera temeraria y hasta bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
De ahí que a las puertas de esta nueva temporada estival especialistas de Promoción y Educación para la Salud insistan en la necesidad de evitar riesgos a niños y adolescentes, los cuales no deben bañarse solos o sin la supervisión de un mayor que sepa nadar; evitar las zonas profundas o acciones peligrosas, entre ellas proyectarse desde alturas, jugar en la playa o piscina.
Asimismo, no es recomendable entrar al agua inmediatamente después de desayunar, almorzar o la comida y menos cuando hay oleajes fuertes en el mar y nunca combinar baño con ingestión de bebidas alcohólicas al igual que la entrada a ríos, canales y playas en el horario nocturno.
Otras precauciones a adoptar es enseñar a nadar a nuestros hijos, así como los mayores aprender habilidades de rescate y reanimación seguros y otras medidas que muy bien pueden prevenir muertes, sin costo alguno.
Por estos días en áreas de salud de la provincia especialistas despliegan actividades de capacitación con personal de salud y población en general para evitar se produzcan esos lamentables hechos, que tanto trauma y dolor ocasionan a la familia, la sociedad.
Uno de los abanderados en esta tarea, es el policlínico Pedro Díaz Coello, donde en varios de sus locales son escenificadas acciones demostrativas para la prevención y control de lesiones no intencionales.
Siempre recordar que “los accidentes no son siempre tan accidentales ni tan imprevisibles”.