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El cáncer puede prevenirse y controlarse

Cáncer de mama


En Cuba, donde la Medicina se ha caracterizado por su carácter preventivo, desde finales de la década de los ´60 se estableció el primer Programa Nacional de Control de Cáncer, dirigido, en lo esencial, a la detección de esa enfermedad maligna en el cuello del útero; sin embargo, a partir de la identificación de otras complicaciones de salud se fueron estableciendo otros, de manera paulatina, con el objetivo de encontrar soluciones a esta problemática para elevar la calidad de vida de la población.


Así, en 2006 el Ministerio de Salud Pública instituyó la Unidad Nacional para el Control del Cáncer, que luego dio paso a la Sección Independiente de Control del Cáncer (SICC), cuya finalidad, en todos los casos, fue “lograr el impacto a escala poblacional de reducir la incidencia y mortalidad por este motivo” y atender de manera particularizada los principales factores de riesgo de esta patología.


No obstante, hoy en el país, como lo es en la provincia de Holguín, las enfermedades oncológicas constituyen la segunda causa más frecuente de morbimortalidad, después de las cardiovasculares, muy a pesar de todas las acciones implementadas en la educación y promoción de estilos de vida saludables, prevención, programa de detección precoz, precocidad en los diagnósticos y tratamientos; pesquisa activa y otras medidas previstas desde la atención primaria de salud (APS) hasta la secundaria, con la fortaleza de contar con el Centro Territorial Oncológico, con cobertura a otros territorios.


La doctora Mirtha Moreno Infante, jefa de la Sección de Cáncer en la Dirección Provincial de Salud, al abordar la situación del territorio holguinero explicó que en 2021 hubo un incremento de las tasas de incidencia en 12 localizaciones más frecuentes de esta enfermedad en ambos sexos, entre ellas, en tráquea, bronquio y pulmón; próstata, intestino, colon, mama, laringe, esófago, con aporte de las tres primeras del 41,6 por ciento del total de defunciones.


En tanto, que las más frecuentes en el sexo masculino fueron: piel, pulmón, próstata, labio, bucal y laringe, mientras que para el sexo femenino piel, mama, cuello de útero, pulmón y colon. Y en la etapa infanto-juvenil (menores de 20 años) las principales causas resultaron leucemias, linfomas, tumores del sistema nervioso central y tumores óseos.


Ante esta situación y a propósito del 4 y 15 de febrero, Día Mundial contra el Cáncer y el Internacional de lucha contra el cáncer infantil, respectivamente, en la provincia se emprendió un amplio programa desde la APS para actuar en la prevención y control de esta enfermedad.


Por ejemplo, en cada área de salud se destinó un consultorio centinela, donde especialistas realizarán pesquisa activa de todos los tipos de cáncer por personal capacitado y, de manera específica, serán citadas personas con antecedentes de familiares con esta enfermedad, además se desplegarán actividades de promoción y prevención, a partir de que ante cualquier cambio en el cuerpo o en su comportamiento el paciente acuda al médico, pues actualmente un alto número llega en etapas III y IV al momento del diagnóstico.


Por otra parte, en la provincia se implementará un proyecto de búsqueda de tumores abdominales en pacientes pediátricos, a partir de un estudio de la morbilidad y mortalidad por esta causa en niños, de la doctora Yurieenk Cordovés Almaguer, especialista en cirugía pediátrica, que concibió un protocolo que comprende la realización de ultrasonido abdominal programado a pacientes, con el objetivo de lograr el diagnóstico precoz de esa enfermedad maligna en los menores de edad hasta en estadío asintomático, porque serán pequeños que asistirán a consulta en una fecha señalada para efectuarles ese procedimiento a manera de pesquisaje.


También, iniciará otro dirigido a la búsqueda de tumores malignos de ovario, muy frecuentes en mujeres mayores de 35 años, porque en sentido general las féminas acuden tardíamente al médico, como además ocurre con pacientes con esta enfermedad en tráquea bronquio y pulmón; próstata, cérvix, boca, mama, colon y piel.


En tal sentido Moreno Infante recalcó en la necesidad del autoexamen de mama cada mes; no pasar por alto los trastornos digestivos ni en el hábito de hacer las necesidades fisiológica; la ronquera sin una causa bien fundamentada; los problemas en la deglución de alimentos; lesiones en la piel que cambian de color y aumentan de tamaño; sangramiento rectal, entre otros signos que deben llamar a la reflexión y a la búsqueda inmediata del médico.


Serán estos días de febrero momentos propicios para recapacitar y no descuidar la salud, eliminar factores de riesgo, como el consumo de alcohol y tabaco, procurar una alimentación balanceada, realizar ejercicios físicos y prestar mayor atención a nuestro cuerpo.

 

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