Mi acuarela de Brasil
- Por Ivett Tejeda
- Publicado en Holguín
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En el año 2014 mi mamá viajó a Brasil como parte del Programa Mais Medicos para o Brasil (Más Médicos para Brasil) y esta sería su segunda misión internacionalista, en apoyo a los ideales solidarios de nuestro país. Después de unos días de preparación recibió su ubicación en el estado de Minas Gerais, BeloHorizonte capital del mismo y específicamente en Jequitibá, un territorio pequeño.
Allí trabajó en las zonas rurales, trasladándose a los lugares de difícil acceso, ocho comunidades, cuya pobreza le hacía difícil obtener una atención médica, junto a un equipo conformado por: chofer, enfermera, asistente, en ocasiones fisioterapeuta o psicólogo y ella como médico. Se enfrentó a enfermedades que solo conocía de su existencia por los libros de medicina, y a un idioma que podría considerarse como dialectos del portugués que es el idioma oficial del gigante sudamericano. En algunos lugares, ni siquiera estaban creadas las condiciones para atender a pacientes, pero hasta allí llegó, con la voluntad de ayudar, de salvar vidas.
Tuve la satisfacción de acompañarla por un breve período de tiempo y sentirme orgullosa de su labor. Los brasileños abrieron las puertas de sus casas a los cubanos, se convirtieron en maestros de portugués para aquellos seres que llevaron sus conocimientos hasta ellos sin ponerle un precio.
Un país enorme, de maravillosos paisajes y gigantes edificios, que Cuba como otros países respondieron a la solicitud de ayuda para mejorar la calidad de sus servicios médicos.
Los doctores cubanos no solo prestaron atención médica, sino que también tuvieron que desarrollar un proyecto dirigido por la Universidad de Minas Gerais, donde realizaron valiosas investigaciones acerca de la situación médica de los respectivos territorios donde se encontraban, entre otros muchos temas, el embarazo en la adolescencia. Era una especie de especialización y un reconocimiento a su esfuerzo y dedicación, pues la mayoría ya no eran tan jóvenes y tomaron nuevamente los libros en otro idioma que no era el suyo.
Fueron miles los médicos que como mi mamá pasaron años lejos de sus seres queridos y en estos días regresan a la Patria con la convicción de que sus principios no son negociables.
Cuba es y será ejemplo de solidaridad y humanismo. Los médicos que regresan con la satisfacción del deber cumplido confirman esto, al igual que aquellos que estuvieron en Brasil y hoy están nuevamente en otro país cumpliendo con su deber y se mantienen firmes y fieles a nuestra Revolución.
